Un día aparecistes, y ni siquiera llamastes a la puerta, entrastes
directamente por la ventana, sin pensarlo. Yo no te buscaba, y tú ni
siquiera me buscabas a mí. Pero nuestros destinos se encontraron, y
pasó. Sé que ha costado mucho, pero por fin estamos juntos. Como siempre
había querido, pero por unas cosas u otras, no había sido completamente
imposible. Y me veo feliz, junto a tí. Puede que no sea como el resto,
simplemente no soy como tus novias anteriores, soy yo, y eso es
precisamente lo que cambia. Y no quiero inseguridades, no quiero dudas,
porque si algo tengo claro es una cosa : '' si estoy aquí es para
quedarme porque no hay un mejor destino que en aquel que dos personas se
encuentran cuando ni siquiera se estaban buscando. ''
No hay comentarios:
Publicar un comentario